¡Puras buenas actuaciones!

Toto

Estos días nos ha dado por hacerle ver a mamá nuestra protesta porque el fin de semana se fue y nos dejó tristes y sin dormir en la cama de perro. Un día antes de su viaje, mi papá hizo de las suyas -como siempre-... Este fue el episodio.

Cuando vamos a dormirnos, y ahora con fríos más que antes, mamá nos extiende una cobijita con una Hello Kitty para nosotros solitos, mientras ella se tapa con otra más grande que por extrañas razones no le gusta compartir con nosotros. Como Pochaco ya es un viejito a veces se pone necio, y cuando mamá dice "bájense de la cama porque voy a poner la cobija" yo muevo mi colita y me bajo de un brinco, pero a él le gusta dar 3 vueltas y acomodarse justo en medio y no se quita por nada del mundo. Cuando ella se acerca a moverlo él suelta ladridos, gruñidos, mordidas y casi siempre se sale con la suya.

Este viernes pasó lo mismo: mamá habló y Pochaco no movió ni un bigote, entonces las cobijitas se extendieron y él quedó como bulto a mitad de la cama. Mamá se acostó y empujó a mi papá tal y como lo hace conmigo cuando -según dice con voz fuerte- invadimos todo su lugar para dormir, y él, como ya sabe que cuando hace todo su show ya ni caso le pone, al sentir el pie empujador fingió que le daba tremenda clase de tos y que vomitaba; mamá por supuesto dio un brincote horriblemente alarmada y cuando lo destapó él sólo se le quedó viendo sin mover ni un ojo y con cara de "Jejeje, te asusté", lo tapó y al siguiente empujón ocurrió lo mismo y lo mismo.

Ese papito mío es muy viejecito pero merece el Oscar Canino al mejor primer actor, porque logró lo que quería (hacer enojar a mamá) y quedarse solito sobre la cobija prohibida.

Yo también muestro mi desacuerdo porel abandono de una noche y he llorado mucho (lo de ser actor también me sale naturalito) y hoy creo que me pasé porque mi abuelita pegó tremendo alarido cuando entré a la cocina y alcé mi patita en la mesa dejando un gran gran charquito... ¡Ups!